Malas prácticas democráticas

El concejal de Seguridad Ciudadana y Emergencias, Antonio Ortolá, está encantado de conocerse. Vive sumergido en una mentira constante, pero llega a autoconvencerse de que su gestión es ejemplar.

Lo suyo es puro teatro, una representación diaria en la que está más preocupado por recibir ‘likes’ en las redes sociales que por gobernar: poca verdad y mucha mentira, algo que marca sin duda el día a día del Gobierno de la Vergüenza del bipartito PP-Vox que preside Begoña Carrasco.

La ciudadanía aún espera la Policía de Barrio, que haya una vigilancia constante en todos los distritos más allá del despliegue por el centro. Otra burla más.

Dignificar la Policía Local no es izar banderas en la puerta de Tetuán XIV, utilizando para ello la imagen de los agentes para una foto de portada. Por cierto, un acto al que ni siquiera fuimos invitados.

Mejorar el día a día de la Policía Local y los Bomberos no es llenarse la boca diciendo que se aumenta el presupuesto para uniformes, pero silenciar la reducción drástica de partidas destinadas a la formación o a material técnico.

Quizás absorto en sus continuos discursos de odio, al señor Ortolá se le olvida que existe una Agrupación Municipal de Voluntarios de Protección Civil que cumplen con su cometido pese al ninguneo del concejal responsable.

Tampoco se acuerda de cumplir con la obligación legal de dar información a los sindicatos, ni de contestar al propio Síndic de Greuges. Claro, para él debe ser prioritario grabarse vídeos donde queda retratado.

Anunciación Lainez
Concejala del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Castelló