El PSPV define los dos años de gobierno de Begoña Carrasco como “una agencia de espectáculos y saraos” que apuesta por “el odio y los insultos”

• Patricia Puerta, portavoz del Grupo Municipal Socialista, destaca el incumplimiento del pacto PPVox “pues de los 90 puntos que recogía el acuerdo del Gobierno de la Vergüenza solo han ejecutado 19, de los que 9 eran ya herencia del anterior gobierno progresista del Acord de Fadrell”

• Rafa Simó, secretario general del PSPV, defiende el trabajo de fiscalización y la “alternativa” en la que está trabajando el Partido Socialista y asegura que PP y Vox “están solo preocupados en ver quién llama más la atención, unos con sus discursos de odio y otros, con fotos y reels”

• José Luis López, portavoz adjunto del Grupo Municipal Socialista, lamenta que Castelló “tenga una alcaldesa que ha permitido y permite que la mentira, el racismo y la homofobia formen parte del día a día del gobierno municipal que preside”

• José Luis Lórenz, diputado autonómico, recalca que Castelló, en cuestiones de servicios sociales, educación, sanidad y vivienda, “está peor que hace dos años porque, además, Begoña Carrasco no reivindica nada a Carlos Mazón”

Dos años de gobierno de Begoña Carrasco marcados por la radicalización, el postureo, los discursos de odio, las chapuzas y el desmantelamiento del Estado del Bienestar en Castelló. Esta es la radiografía de la gestión del Partido Popular y Vox al frente del ayuntamiento, “que han logrado convertir la ciudad en continuo bochorno nacional”, señala Patricia Puerta, portavoz del Grupo Municipal Socialista, declaraciones realizadas en el balance del ecuador de mandato junto al portavoz adjunto, José Luis López; el secretario general del PSPV de Castelló y diputado autonómico, Rafa Simó, y el también representante socialista en Les Corts José Luis Lórenz.

En su intervención, Patricia Puerta ha señalado que “el Gobierno de la Nada del que hablamos hace un año se ha convertido en el Gobierno de la Vergüenza”, hasta el punto de convertir “una ciudad solidaria, sostenible y moderna en una ciudad radical”. Esto se ha traducido en un incumplimiento del pacto de la derecha y la ultraderecha, “pues de los 90 puntos que recogía solo han ejecutado 19, y eso teniendo en cuenta que 9 eran herencia del Acord de Fadrell”.

La lista de incumplimientos “es larga”, como la “inexistente promoción de la vivienda pública con alquileres asequibles para la gente joven”, o el famoso plan estratégico de limpieza “que solo parece existir en la plaza Mayor y aledaños, porque solo basta pasearse por los barrios para ver que están absolutamente abandonados”. En esta línea, Patricia Puerta ha incidido en la artificial bajada de impuestos a la ciudadanía, “porque ya verán los vecinos y vecinas lo que van a tener que pagar de tasa por el Basurazo de Carrasco: hasta 200 euros”.

Otros anuncios “que se han quedado en nada” son la erradicación de las plagas de mosquitos, ratas y cucarachas, la irreal policía de barrio, la regularización de las viviendas de la marjaleria o la enfermera escolar. Frente a ello, “muchas chapuzas en la gestión, como todos hemos podido ver con las campañas comerciales del Día de la Suegra y de San Valentín, o el fiasco de las primeras ayudas a los comercios afectados por las obras de la Zona de Bajas Emisiones”.

Para Patricia Puerta, “en una cosa si que ha cumplido Carrasco, que es el situarnos en el mapa nacional, pero el de la vergüenza”. El caso más llamativo es del concejal de Movilidad, Cristian Ramírez, “pues es inconcebible que siga cobrando 62.000 euros al año pese al escándalo de 170 multas que acumuló en zona azul, de las que 105 nunca se llegaron a pagar”, o que “tengamos una concejala en el Grau, Ester Giner, que nos cuesta, junto a sus asesores 110.000 euros al año, más dinero del presupuesto que tiene que gestionar”.

Frente a ello, el PSPV “ha realizado un continuo trabajo de fiscalización para poner en valor nuestro modelo de ciudad”. En este sentido, desde el Grupo Municipal Socialista se han presentado en estos dos años 96 iniciativas plenarias, 125 ruegos y preguntas plenarias, 1.160 ruegos las comisiones municipales, 65 enmiendas a los presupuestos de 2024 y 76 a las cuentas municipales de 2025. Y junto a ello, reuniones con entidades vecinales y cívicas de toda índole “para defender los intereses de las y los castellonenses”.

“Un 10 a Carrasco en saraos, espectáculos y marketing
Rafa Simó, con ironía, ha señalado que “no vamos a suspender al PP en todo, porque Begoña Carrasco se merece un 10 en saraos, espectáculos y marketing”. El secretario general del PSPV en Castelló, en esta línea, ha destacado que el gobierno municipal de Castelló, en estos dos años, “más que un gobierno que soluciona problemas se ha convertido en una agencia de espectáculos”.

A su juicio, PP y Vox “están mas preocupado en ver quién llama más la atención: una parte de ellos en discursos de odio y otra, en fotos y reels”. Frente a ellos, en cualquier caso, “estará el Partido Socialista, que no se va a quedar callado y que está construyendo una alternativa”.

En este balance de dos años, “Castelló está peor que en 2023, porque están más preocupados del postureo que de solucionar problemas, y porque son rehenes de un Carlos Mazón que desde hace 7 meses no aporta nada positivo a la Comunitat Valenciana y a Castelló”. Frente a ello, “y a pesar de que el Partido Popular presiona a los colectivos para que no se hagan fotos con nosotros, vamos a seguir escuchando a la ciudadanía y a construir una alternativa”.

Silencio ante los insultos
Por su parte, el portavoz adjunto del Grupo Municipal Socialista, José Luis López, ha lamentado que al frente del Ayuntamiento de Castelló haya una alcaldesa, Begoña Carrasco, “que ha permitido y permite que la mentira y los discurso de odio insultos formen parte del día a día del ayuntamiento”.

Ejemplos hay muchos, “como la intervención en el pleno de un miembro del gobierno municipal comparando el derecho de la mujer a interrumpir su embarazo con el Holocausto, todo con el silencio de Carrasco”. O el “ataque continuado a la cooperación al desarrollo, eliminando cualquier ayuda a la población palestina y negando incluso el genocidio en Palestina por parte de Israel”.

López ha subrayado además el habitual discurso del concejal de Seguridad de Begoña Carrasco, Antonio Ortolá, vinculando siempre inmigración con delincuencia que, además de no ser cierto, es racista”. O que el concejal de Familia, Alberto Vidal, se mofe de la lucha de los colectivos LGTBI, además de las palabras de la edil de Turismo, Arantxa Miralles, “afirmando que no existe un cambio climático sino solo tiempo cambiante”.

Con todo este panorama de fondo, “el problema no son solo los comentarios que se vierten, sino el silencio cómplice de Begoña Carrasco, que para maquillar su imagen se limita a convocar, por ejemplo, el Día del Orgullo sin ir de la mano de los colectivos, un acto que no es una fiesta, como dice Carrasco, sino una reivindicación”.

Carrasco abandona la educación y la sanidad
Finalmente, José Luis Lórenz, diputado autonómico del PSPV, ha recalcado que Castelló, en cuestiones de servicios sociales, educación, sanidad y vivienda, “está peor que hace dos años porque tenemos una alcaldesa que, además, no reivindica a Mazón”.

En la ciudad sí hay dos nuevos colegios que están a punto de abrir sus puertas, el Mestre Canós y el Sebastián Elcano , “pero que nadie olvide, por muchas fotos que se haga Carrasco, que han sido posibles gracias a los gobiernos de progreso liderados por el PSPV”. Lórenz, además, ha recordado que el Acord de Fadrell “dejó preparadas cinco memorias de colegios que están en situación lamentable -Antonio Armelles, Bisbe Climent, Cervantes, San Agustín y Carles Selma- pero Carrasco los ha dejado de lado”. Y como el tiempo pasa, “ya hay dos centros que necesitan también intervenciones, como el Jaume I y el Soler i Godes”. Además, “por mucho que prometan no hay ni habrá nada con el IES Crèmor y el nuevo conservatorio”.

En temas de sanidad, “las listas de espera en intervenciones quirúrgicas en el Hospital Provincial se han incrementado un 8% y en el General en un 82%, el peor dato de toda la Comunitat Valenciana”. Los problemas crecen además en servicios sociales, “pues se está privatizando la atención nuestros mayores”, igual que en vivienda para las familias necesitadas y la juventud, “pues el precio de la VPO se ha incrementado hasta los 2.400 euros por metro cuadrado, un área donde la única preocupación del PP es la especulación”.