Mocatriz
Castelló vive esta semana su semana grande, las Fiestas de la Magdalena, donde la ciudadanía aparca por unos días su rutina. El éxito de público está garantizado, porque es la calle la reina de las fiestas fundacionales.
Hay representantes políticos, en cualquier caso, que piensan que el protagonismo es suyo. Este es el caso de Begoña Carrasco, la alcaldesa que surgió del Pacto de la Vergüenza con la ultraderecha. Lleva meses vendiendo a los cuatro vientos que han recuperado la autonomía de la Junta de Fiestas, falacia que se creen de tanto repetir.
Un vistazo a las redes sociales del Ayuntamiento de Castelló nos deja patente que aquí no hay autonomía, solo hay Begoña Carrasco. Ya sea disfrutar de la mejor mascletà de hace años o de la gran participación en cualquier evento, todo parece ser gracias a la alcaldesa. Foto tras foto que dejan en segundo plano a las reinas, y no ya digamos a la Junta de Fiestas.
A Begoña Carrasco se le queda pequeño el papel de alcaldesa. Se ha convertido en la particular Mocatriz de la ciudad de Castelló: Modelo, Cantante y Actriz. Ni en fiestas es capaz de aparcar su excesivo protagonismo, acompañada siempre por un equipo de propaganda que, hay que reconocerlo, maquilla bien la pésima gestión de una alcaldesa que solo se preocupa por el centro, que abandona los barrios y que ha permitido que el discurso del odio se mueva a sus anchas por el ayuntamiento.
Patricia Puerta
Portavoz del Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Castelló
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