Begoña Carrasco “inicia el desmantelamiento del Pacto Local por el Empleo” al eliminar las ayudas a la economía social y repartir solo el 37% de las presupuestadas en 2024

• La portavoz del Grupo Municipal Socialista, Patricia Puerta, lamenta la “incapacidad de la alcaldesa por reclamarle partidas presupuestarias a su jefe Carlos Mazón, que nos hace perder para 2025 los 311.500 euros que aportaban desde Labora al consorcio”

• La decisión del PP de penalizar la concesión de ayudas al tejido empresarial y entidades sociales, impidiéndoles concurrir con varios proyectos y limitándolo solo a una línea de subvenciones, “ha acabado con un absoluto fiasco, porque de los 615.000 euros reservados en esta partida solo se ha repartido el 37 %”

La portavoz del Grupo Municipal Socialista de Castelló, Patricia Puerta, ha calificado de “sorprendente” la euforia mostrada por el concejal de Hacienda, Juan Carlos Redondo, tras la reunión celebrada ayer para aprobar el presupuesto del Consorcio Pacto Local por el Empleo, “porque lo único que hemos podido constatar es que el objetivo del Partido Popular es desmantelar poco a poco esta entidad”.

Ya se pudo comprobar en las cuentas de este 2024, “donde limitaron las posibilidades del tejido empresarial y entidades sociales a optar a ayudas, y nos lo vuelven a mostrar para 2025, eliminando sin contemplaciones la partida de subvenciones de economía social y perdiendo miles de euros que llegaban de la Generalitat Valenciana”.

Patricia Puerta, representante del grupo socialista en el consorcio, ha señalado que las cuentas aprobadas para 2025 “nos muestran un maquillaje exterior que no ocultan el deterioro continuado de los objetivos del consorcio desde que la derecha gobierna en el ayuntamiento”.

Uno de los aspectos más llamativos, a su juicio, es que para 2025 “desaparezcan los 311.500 euros que aportaba la Generalitat desde Labora y que tengamos a una alcaldesa que, consciente de que la nueva convocatoria de fondos no se ha convocado aún, haya decidido taparse los ojos, callar y no enfadar a su jefe del PP”. Para Puerta, “Begoña Carrasco, que tanto se llenó la boca diciendo que lo primero eran los y las castellonenses, ya nos ha demostrado su absoluta rendición a Mazón porque no ha sabido estar encima del tema para reclamar esta convocatoria”.

Para intentar ocultar esta desaparición de fondos “el ayuntamiento ha aumentado levemente su aportación al consorcio, pasando de 857.000 a 880.000 en números redondos, pero la realidad es que el presupuesto real baja un 19,73 %, un dato más que refleja lo que le interesa al PP el trabajo del consorcio para el fomento de empleo en nuestra ciudad”.

Cero euros para economía social
Otro de los aspectos llamativos es que desaparece de las cuentas de 2025 el apartado de subvenciones a empresas de economía social, que se queda a cero cuando el año pasado contaba con 215.000 euros. Unas ayudas que nacieron en 2017, de la mano del Partido Socialista, con el objetivo de impulsar la contratación de personas en situación de desempleo en entidades como cooperativas, empresas de inserción laboral, mutualidades, fundaciones, asociaciones y centros especiales de empleo.

Estas ayudas, como recuerda Patricia Puerta, “se concedían siempre íntegramente e incluso hubo años en los que se tuvo que ampliar crédito”. Los datos del periodo 2017-2023 hablan de un montante total de 886.000 euros en subvenciones que supusieron la creación de 10 nuevas empresas en Castelló y cerca de 70 altas en la Seguridad Social.

Por ello, tras la decisión de Carrasco y Redondo de eliminar este apartado, desde el Partido Socialista se había presentado una enmienda para abrir una partida de 50.000 euros con la meta de mantener las ayudas a la economía social, “pero la respuesta del PP ha sido el rechazo absoluto”.

Fiasco en el reparto de ayudas en 2024
Pero los datos relativos a las políticas de fomento del empleo del actual ejercicio “dejan otra conclusión demoledora: de los 615.000 euros previstos para ayudas al tejido empresarial y entidades sociales solo se ha concedido el 37 %, un absoluto desastre que refleja el despropósito que fue cambiar de criterios, penalizar a las empresas y entidades sociales y limitar sus peticiones de subvenciones a un único proyecto”.